La Sonrisa del recien nacido Jesus llegue a vosotros reflejada por su dulce Madre Maria.
La Estrella de Navidad ilumine vuestros corazones y nunca perdais la alegria y la gracia de sus claros resplandores.
Todos los años, al llegar las Navidades, saludamos a nuestros Padres y Amigos, ya por medio de postales, ya de viva voz, con MUY FELICES PASCUAS Y UN PROSPERO AñO NUEVO.
Es un cumplido, es un deseo vano, no en si, sino en la eficacia que le puede prestar quien lo expresa.
Mucho mejor hablaban nuestros abuelos cuando decian con un sentido practico y sapientisimo : BUENOS DIAS, NOS DE DIOS. 
Que podemos hacer nosotros, en efecto, que pueden hacer los hombres, para dar a nadie la paz y la tranquilidad ? Lo estamos viendo.
La Navidad es el recuerdo de la Navidad de Nuestro Senor Jesucristo hecho hombre para salvarnos. A El, y solo a El debemos acudir para que nuestros deseos, nuestros anhelos se cumplan.
Felicitemos a nuestros amigos, mandemos tarjetas a nuestros familiares, enhorabuena, pero que todos esos actos lleven un sentido de verdad, no de hipocresia, sean un deseo eficaz, no de mera ilusion.
Y para ello expresemoslos en forma parecida a la de nuestros antepasados :
Que el divino Niño Jesus,
Aquel que nacio en Belen,
Bendiga nuestros hogares
Y nos de su gracia.
Amen
